Cómo poner una pulsera tú sola. Puede parecerte fácil, pero en ocasiones no es así. Aquí tienes 4 trucos para conseguirlo.
Te damos varios métodos con los que ponerte una pulsera tú sola.
Elige aquel que mejor te vaya.
Seguro que más de una vez te ha ocurrido que has sido incapaz de ponerte una pulsera porque no has tenido a alguien que te pudiera ayudar y tú no has tenido la paciencia suficiente para hacerlo.
A partir de ahora ya dejarás de tener ese problema y sufrir incómodas posturas que para nada te ayudan a conseguir tu objetivo.
Atenta que ponemos a tu disposición hasta 4 métodos con el que ponerte, casi en un abrir y cerrar de ojos, nuestras fantásticas pulseras. ¡¡Toma nota!!
Cinta adhesiva o celo.
Coge un pedazo de cinta adhesiva o celo que no sea súperadhesivo.
Coge la pulsera sobre tu muñeca y pega uno de los extremos a la piel.
Rodea tu muñeca con la pulsera y abróchala.
Quita el trozo de cinta y ya lo tienes.
Utiliza un clip.
Abre el clip e introduce uno de sus extremos por la pulsera sujetándola con un par de dedos, rodea tu muñeca con la pulsera y abróchala con la otra mano.
Con un imperdible.
Abre el imperdible e introduce el cierre de la pulsera en su interior.
Sólo tendrás que rodear tu muñeca con la pulsera y, con la otra mano, podrás abrocharla sin ningún problema. Retira el imperdible y ¡¡lista para lucir!!
Cómo poner una pulsera: los trucos de Möm Joyas
Utiliza una superficie plana.
Coloca la pulsera sobre una superficie plana, pon sobre ella la parte posterior de tu antebrazo sosteniendo el broche con tus dedos índice y pulgar.
La otra mano puedes usarla para abrochar la pulsera. ¡¡Súper fácil!!
A partir de ahora, lucir una de nuestras pulseras no dependerá de que alguien te eche una mano, con cualquiera de estos cuatro métodos que te proponemos seguro que lo consigues. Pruébalos y nos cuentas.