Un reloj puede decir mucho más de ti de lo que piensas, en infinidad de ocasiones es además el primer golpe de efecto que marca tu propia personalidad frente a los demás.
Hoy desde MÖM Joyas nos hemos propuesto ayudarte a elegir el que más va contigo.
Uno de los complementos estrella de esta primavera son los relojes. Ideales para completar y dar un toque especial y sofisticado a tu outfit. De grandes y pequeñas esferas y cuidadas correas con espectaculares brillos que llamarán la atención de todo aquel que te encuentres.
Diferentes relojes con estilos muy distintos entre los que tendrás infinitas correas de colores, materiales y medidas.
Pero ¿cómo decidir cuál es la mejor opción? Hay varios factores que influyen sobre la elección de uno u otro reloj. ¡¡Toma nota que te resumimos las más importantes!!
Lo principal que hay que considerar es el tamaño de la muñeca ya que si ésta es muy delgada, por debajo de 15 centímetros, debes evitar los relojes con esfera de diámetro superior a 40 milímetros ya que el efecto no será, para nada, vistoso.
Si por el contrario, tu muñeca supera los 20 centímetros de diámetro, tu reloj ideal tendrá como mínimo 42 milímetros de diámetro; de lo contrario, puede quedar ridículo en tu muñeca.
Dependiendo del material de la correa también podemos hacer ciertas distinciones.
Los materiales más habituales en su confección suelen ser la piel, el caucho o los metálicos y dependiendo de cuál sea el estilo y la ocasión donde tengas pensado lucirlos será más interesante un material u otro.
Las correas metálicas suelen ser más habituales en ocasiones especiales como puede ser una cita con la familia o amigos.
Las correas de caucho son utilizadas en ocasiones mucho más informales donde el look elegido puede ir, incluso, combinado con ropa deportiva.
Las correas de piel son ideales para citas importantes como una reunión o entrevista de trabajo.
El grosor de la correa también es un elemento que influye en la elección del reloj. Debes tener en cuenta, al igual que al elegir la esfera, el tamaño de la muñeca. No te decantes por correas muy anchas si tu muñeca es pequeña. De igual forma, si tu muñeca es grande, un reloj con la correa estrecha quedará ridículo e insignificante.